Chick Lit para todas por Julia Larotonda

¿Qué es la Chick lit?
Este género, traducido como Literatura para chicas (o pollitas), nace a mediados de los años 50s con los folletines y a la novela romántica. En sus orígenes se refería a una segunda ola del feminismo. Estas novelas trataban las nuevas situaciones a las que se enfrentaba la mujer que recién comenzaba a liberarse. Trabajo, relaciones de pareja, deseos, nuevos ideales y participación en la sociedad. Poco a poco, el género ha ido evolucionando, adaptándose a los intereses y preocupaciones de la mujer posmoderna, hasta convertirse en la nueva novela rosa. Escritos con humor y aparente liviandad, son una inversión segura para pasar un rato divertido.

La receta del éxito. Cada una trata temas diferentes, pero todas coinciden en las compras, la moda, los hombres, las amigas y las dificultades con las que se encuentran en el ámbito profesional. Todo lo que hoy día nos interesa y divierte a las mujeres.

Bridget Jones y Carrie Bradshaw. Fueron las dos protagonistas que dieron a este fenómeno dimensiones estratosféricas. Ayudadas por dos medios que siempre ayudan a magnificarlo todo, el cine y la televisión, se han convertido en referencia obligada de este género.
Londres y Nueva York son dos capitales que suelen ser escenarios elegidos para este tipo de novelas, pero ahora ya se está ampliando a todas las grandes metrópolis, hay chick lit española, en la India y hasta en la China. Ahora, gracias a Sudamerincana, también
en Argentina.
Las protagonistas son mujeres cosmopolitas, que frecuentan los locales de moda, tienen un buen trabajo y buen poder adquisitivo. Casi siempre, tienen que lidiar con concordar su vida personal y la laboral en una jungla de cemento. Y lo que las obsesiona aparece como común denominador: los hombres.

                       

¿Por qué se da el Boom chick lit en Argentina?

Yo creo que el boom del chick lit se da por que la mujer cambió mucho en las últimas décadas, a la par del hombre. Así como el estrógeno comenzó a invadir a los muchachos dando lugar al “metro sexual” (hombres que dedican mucho tiempo y dinero a su imagen y estética), el genero femenino también fue influenciado por cierto porcentaje de testosterona dejando de ser el sexo débil para convertirse en un ser fuerte y poderoso.

Eso no quita que siga queriendo verse bella, seductora y que para lograrlo roce con cierta frivolidad. Pero la mujer posmoderna ya no se contenta con ser madre, ama de casa y esposa, si bien aquellos mandatos están muy inculcados en su inconsciente, hoy ella tiene objetivos claros para lograr reconocimiento profesional y alcanzar importantes puestos laborales. Sin embargo todos estos intereses a veces se superponen generándole emociones encontradas en su corazón que sigue siendo sensible como siempre.

Y como la mujer cambió la literatura para ella también debe mutar. Por eso nace la chick lit. En Argentina este género aún no estaba explotado, por eso la editorial Sudamericana lanzó esta nueva colección chick lit bajo el sello Plaza & Janés.

El primero de los títulos es la novela“Luz, cámara, acepto” de Julia Larotonda ( o sea mia)

Cuenta la historia de Paloma Dellapenna, una actriz desconocida de ninguna preferencia religiosa que se casa con un publicista proveniente de una adinerada familia judía. Luego llega a la fama en el mundillo mediático argentino y su vida se convierte en sátira cuando aparece en todos los talk shows siendo la protagonista de un escándalo. Una historia femenina con mucho humor, amor, amistad, y enredos.

El segundo título se lama “Mi libertad por un novio” de Viviana Kahn.

Es una sucesión de ensayos y horrores de una soltera de más de treinta. Historias de desencuentros amorosos de una chica que toma la vida por asalto y decide llegar hasta las últimas consecuencias para encontrar el amor.

Y el tercero hasta ahora publicado “Sábados de súper acción” de Verónica Schulman cuenta la historia de Moro, una mujer que el día de su cumpleaños número veintinueve decide que ese será el año en que conozca al amor de su vida y a partir de ahí conocerá diferentes hombres hasta, finalmente, dar con el indicado.

Modelo de la mujer chick lit

Cosas que no pueden faltarle a una protagonista chik lit:
Juventud: las protagonistas son chicas que tienen entre 25 y 35 años.
Ser profesional o ir en esa dirección. En general son mujeres independientes, de clase media o superior, que, en muchos, caso viven solas. Son emprendedoras, intuitivas, avasallantes y suelen tomar muchas decisiones. Suelen desempeñarse como actrices, periodistas, modelos, gerentas, directoras de editorial de importantes magazines.
Los trabajos en general se relacionan con la fama y el éxito y por o general las circunda el mundo de la moda y cierta frivolidad de lo material.
Si bien los hombres son un claro objetivo de conquista, la mayoría de estas nuevas heroínas pueden vivir sin un hombre a su lado (ni azulado). Son sexualmente liberales y proponen nuevos modelos de familias (madres solteras, divorciadas, madres lesbianas y también está la madre tipo pero por lo general éstas no son sólo amas de casa como las de antes, en estos casos ellas deben buscar alternativas para ser madres, esposas sexys y mujeres realizadas a la vez.

Mi experiencia
Luz, cámara, acepto nace por una falta: la falta de literatura chick lit porteña; una chick lit local, latina, con sabor. Es un mercado nuevo y me tocó ser pionera. Como muchas chicas de mi edad consumí Sex and the city, me encantó el diario de Brigit Jones y he leído algún libro de Marian Keyes, pero si bien con ciertas cosas universales de la mujer me siento identificada, hay una realidad que circunda a los personajes que difiere muchísimo de nuestra realidad porteña. Es otro contexto, otros gustos, otra moda, otro lenguaje, otras expresiones de afecto entre amigas. En nuestras heroínas se ve un poco de todo esto a la hora de vestirse y decorar sus hogares, pero nunca la parafernalia de Sex and the city. Eso se lo dejamos a Holywood, acá lo más parecido es el homónimo Palermo que dista mucho del original.
Por todos los movimientos inmigratorios que hubo, para mí Buenos Aires mas que una ciudad es una“ensalada” es decir, somos como una gran mezcolanza de razas, religiones, colores de piel, ideales, tonadas y costumbres; como híbrido que cuesta mucho amalgamar, por suerte para los nosotros los escritores que encontramos acá miles de conflictos y situaciones cómicas para ficcionar.